Economía de la cultura
La cultura puede impulsar el desarrollo económico sostenible tanto a escala nacional como local. Hoy es necesario reconocer y reforzar los sectores cultural y creativo como motores clave de la economía.
La protección de los derechos sociales y económicos de los artistas y profesionales de la cultura es esencial para garantizar una remuneración justa. Es vital facilitar la movilidad de los trabajadores de la cultura, permitiéndoles compartir su creatividad más allá de las fronteras.
Entablar un diálogo participativo con las plataformas digitales puede abordar cuestiones como la remuneración justa, la protección de la propiedad intelectual y la promoción de diversas expresiones culturales en línea. Al dar prioridad a estas acciones, la cultura puede fomentar la innovación, la equidad y la cohesión social, convirtiéndola en un pilar para alcanzar objetivos de desarrollo más amplios.


