Comunicado de prensa

En la región maya, la integración de la cultura en los proyectos de desarrollo debe reforzar el vínculo entre las tradiciones y el bienestar social, subrayan expertos


En un seminario convocado por la Oficina en México de la UNESCO y el Instituto Regional del Patrimonio Mundial en Zacatecas se presentó el panorama actual de los sitios del Patrimonio Mundial en la región de México y Centroamérica.
Expertas y expertos nacionales e internacionales discutieron sobre los retos que enfrenta la civilización maya, en torno al turismo, el cambio climático, la pandemia por la COVID-19, el desarrollo económico y social y los Objetivos del Desarrollo Sostenible.

Abril, 2021. La integración de la cultura en los proyectos de desarrollo debe reforzar el vínculo entre las tradiciones y el bienestar social, el crecimiento económico y la conservación del medioambiente, a fin de mitigar el impacto que los territorios mayas experimentan desde hace varios años, coincidieron expertas y expertos durante el Seminario Internacional: El Patrimonio Mundial y la Civilización Maya: retos y alternativas, celebrado el pasado 8 y 9 de abril.

Durante el ejercicio organizado por la Oficina en México de la UNESCO y el Instituto Regional del Patrimonio Mundial en Zacatecas se subrayó la necesidad de que el turismo cuente con una planificación y una gestión adecuadas, que genere una mejora de la calidad de vida de las comunidades, así como oportunidades de empleo preferentemente basado en la economía creativa, y que se preserve el patrimonio cultural urbano.

En coordinación con el Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, el Ministerio de Cultura y Deportes de Guatemala, el Instituto Hondureño de Antropología e Historia, el Instituto de Conservación Forestal de Honduras, y la Dirección Nacional de Patrimonio Cultural de El Salvador, el seminario virtual convocó expertas y expertos internacionales y nacionales, quienes ahondaron en distintas temáticas en torno al Patrimonio Mundial de origen maya, su gestión, conservación, buenas prácticas, arqueoastronomía, patrimonio subacuático, turismo sostenible, participación comunitaria, desafíos y respuestas post pandemia, entre otros temas.

Luz de Lourdes Herbert Pesquera, Directora de Patrimonio Mundial del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México; Michelle Toledo, Gestora de sitio, y Víctor Barrientos, Encargado de la actualización de infraestructura en la Dirección Nacional de Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura de El Salvador; Ángel Matute, Viceministro de Áreas Protegidas y Vida Silvestre del Instituto Nacional de Conservación y Desarrollo Forestal, Áreas Protegidas y Vida Silvestre de Honduras; y Ulrike Guerin, del Secretariado de la Convención UNESCO de 2001, son algunos de los expertos y expertas que participaron en los conversatorios de alto nivel.

El acto inaugural y la conclusión del evento contó con la participación de Frédéric Vacheron, Representante de la Oficina de UNESCO México; Mauro Rosi, Jefe de la Unidad Regional para América Latina y el Caribe, del Centro del Patrimonio Mundial de la UNESCO; Diego Prieto Hernández, Director General del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México; Julio Carranza, Director y Representante de la Oficina de la UNESCO en Guatemala y Director a.i. de la Oficina de la UNESCO en San José, Costa Rica; José Francisco Román Gutiérrez, Director del Instituto Regional del Patrimonio Mundial en Zacatecas; y Saúl Alcántara Onofre, Presidente de ICOMOS México.

Durante su participación, el Representante de UNESCO en México resaltó que la cultura maya es de las culturas humanas mejor representadas en la , y subrayó la paradoja de que, en los paraísos turísticos donde se encuentran los sitios patrimonio mundial (sinónimos de riqueza cultural y polos de turismo), los pueblos originarios que los habitan estén marginados y padezcan altos índices de pobreza; existe un alto grado de extinción de especies, deforestación, y muchas otras problemáticas históricas.

Mencionó también que la Oficina en México de la UNESCO busca impulsar, a nivel federal y con las comunidades locales, la creación de un Centro Maya de las Artes, tanto para el reconocimiento de su patrimonio y sus manifestaciones inmateriales, como para su gestión y salvaguardia.

Asimismo, hizo un llamado a armonizar los proyectos de desarrollo con las comunidades locales y con las diferentes convenciones internacionales del marco normativo de la UNESCO, con el fin de trabajar de manera articulada la gestión del patrimonio. En este sentido, sugirió realizar un registro de buenas prácticas con los diversos ejemplos vertidos durante el foro para que, más allá de su reconocimiento y difusión, se realice un trabajo transversal e interdisciplinario para articular la gestión del patrimonio y las comunidades portadoras, a través de medios participativos.

Finalmente, reconoció la importancia de instrumentos como la Nueva Agenda Urbana, el Acuerdo de París y los , de Naciones Unidas, tanto para el reconocimiento de la diversidad cultural, como para abordar los desafíos de la actualidad desde un enfoque de derechos humanos, del derecho a la educación, a la ciencia, a la información y a la cultura.

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