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La UNESCO y la Red de Escuelas Asociadas a la UNESCO en Cuba buscan pintar de colores la educación

Muchos sectores de la UNESCO junto con sus aliados han desarrollado propuestas y herramientas para reimaginar los futuros de la educación haciendo uso de diferentes enfoques que persiguen renovar los sentidos, contenidos, modos de enseñanza y evaluación, así como los escenarios escolares que ya no responden a las necesidades reales de docentes, estudiantes, familias y comunidades.
Frente a la crisis de sentido de la educación y un futuro cada vez más incierto, con previsibles conflictos, desastres climáticos y otros, han surgido diversas propuestas educativas que buscan reencantar el aprendizaje con visión utópica, solidaria y sostenible para aprender a vivir juntos y en armonía con la naturaleza.

Precisamente, la Red de Escuelas Asociadas a la UNESCO ha sido a lo largo de los años una fuente de nuevas utopías, un laboratorio viviente de educación transformadora. En ellas se ha desarrollado en profundidad la ܳó Verde con experiencias de educación ambiental, educación para el desarrollo sostenible y cambio climático, la ܳó Azul, con casos de alfabetización oceánica, ciencias hídricas y la sostenibilidad marina, la ܳó Naranja por medio de la educación cultural, artística y patrimonial y la ܳó Roja, y un sinnúmero de prácticas relativas a ciudadanía global, la paz y los derechos humanos.
La Oficina Regional de la UNESCO en La Habana junto a Coordinadores Nacionales de la redPEA de Cuba, la República Dominicana y Venezuela realizaron una propuesta que recogiera, analice y diera coherencia a las diferentes acciones transformadoras dentro de la redPEA para asegurar iniciativas más efectivas y sostenibles y redujera la sobrecarga docente. Mediante un análisis comparativo temático de contenidos de literatura reciente de la UNESCO se identificaron los patrones de convergencia y divergencia entre los colores verde, azul, naranjo y rojo y posteriormente para ir al mundo real de la práctica docente se realizó un mapeo de acciones transformadoras en la redPEA en Cuba, la República Dominicana y Venezuela mediante un cuestionario estructurado a 734 docentes y se seleccionaron 118 casos clave para un análisis en profundidad.

Los colores
El estudio priorizó en una primera fase cuatro colores (verde, azul, naranja y rojo) por la emergencia climática y la destrucción de la naturaleza, la destrucción y mercantilización del patrimonio cultural y natural y el debilitamiento democrático y la desintegración social.
La educación verde agrupa todos los abordajes de una educación ecológica o ambiental tales como la educación para el desarrollo sostenible, la biodiversidad y el cambio climático con el fin de capacitar a las y los estudiantes para enfrentar los retos ambientales más críticos a nivel global. Este abordaje se centra en desarrollar una conciencia climática profunda y fomentar la acción responsable hacia la sostenibilidad y la protección de la biodiversidad.
La educación azul contiene la alfabetización oceánica, la educación y ciencias hídricas y la biodiversidad acuática para crear conciencia sobre los océanos y fuentes de agua como componentes esenciales del equilibrio ecológico planetario. Este abordaje busca que los estudiantes comprendan cómo los océanos influyen en la vida humana y cómo nuestras acciones afectan la vida marina.
La educación naranja aglutina la educación patrimonial vinculado al patrimonio tangible y vivo y hoy la educación cultural y artística que persigue promover la apreciación de la diversidad cultural, la creatividad y las artes. Este abordaje está orientado a fomentar la creatividad, fortalecer la identidad cultural y preservar el patrimonio cultural material e inmaterial. Y la educación roja bajo el amplio paraguas de la educación para la ciudadanía global que integra temas de educación para los derechos humanos, la paz, ciudadanía digital, educación para prevenir discursos de odio y así preparar a los estudiantes para asumir un rol activo en la construcción de la paz y la justicia social en un mundo interconectado. Este abordaje promueve la justicia social, la equidad, los derechos humanos, y la responsabilidad local y global.
Juntos, estos abordajes interconectados, pueden apoyar la transformación de la educación para que estudiantes de todas las edades sean más capaces de cuidar unos de otros y del planeta, para crear sociedades más pacíficas, justas y sostenibles.
Los colores en acción en la redPEA en Cuba
En el encuentro de la redPEA Cuba realizado durante dos días en la Universidad de la Habana, el 22 y 23 de abril, se compartieron experiencias de educación transformadora impulsadas por las escuelas en el país. Más de 25 directores de todas las provincias del país se dieron cita para conocer en profundidad la propuesta de educación en colores y aprender de experiencias de la red a nivel nacional.
Se conocieron ejemplos de educación verde como el Proyecto “Amamos y protegemos la naturaleza” del ESBU Mártires de la Familia Romero, Sancti Spíritus que busca inculcar en los estudiantes el amor por el medio ambiente a través de acciones concretas como la plantación de árboles y el mejoramiento del entorno escolar, el Proyecto “Transformando nuestro entorno” de la Escuela Primaria Magaly Montane Oropesa, Isla de la Juventud que persigue transformar la relación de los niños con el medio ambiente, inculcándoles hábitos de respeto, protección y convivencia sostenible mediante el fomento de la siembra, el reciclaje y la reutilización del plástico para embellecer la escuela y la comunidad y, el caso de “Proyectores de la Naturaleza” del SI Fernando Cuesta Piloto de Santa Clara, Villa Clara, cuyo objetivo es involucrar a los estudiantes en actividades de cuidado del medio ambiente, tales como la siembra de árboles y la limpieza de la comunidad y promueve la conciencia ecológica mediante concursos y boletines educativos.
Se analizaron los casos de educación azul como el Proyecto “Guardarenas: Amigos del Cachón” de la Escuela Primaria Guerrillero Heroico, Cojímar, La Habana del Este que tiene como propósito la vigilancia y conservación de la playa El Cachón, afectada por la contaminación de un río cercano y educar a estudiantes y comunidad sobre la necesidad de proteger este ecosistema, el proyecto desarrollado en el marco de “Tarea Vida” de la Escuela primaria Carlos Manuel de Céspedes, Cienfuegos con su estrategia de fomento de la conciencia ambiental en niños mediante la reforestación, el monitoreo de la playa Laguna del Cur, y el Proyecto “Protección de playas desde la educación” del Juan Manuel Ameijeiras Delgado, Santiago de Cuba que promueve buenas prácticas para la protección de las playas, insertando la conciencia ecológica dentro del currículo escolar para garantizar la sostenibilidad de los ecosistemas costeros.
En educación naranja se describieron los casos de “Preservando la historia local” de la Escuela Primaria Josué País García, Bartolomé Masó, Granma que fomenta la preservación de la historia local, promoviendo visitas a sitios históricos, también la experiencia del “Rescate de la música tradicional” del Conservatorio Guillermo Tomás, Guanabacoa centrado en la preservación de la música tradicional cubana, mediante una agrupación de estudiantes que tocan instrumentos autóctonos, han creado su propio repertorio, intercambiado con músicos profesionales y promoviendo la cultura a nivel comunitario. Y el proyecto de “Rescate de la tradición oral” de la Escuela Fernando Pérez Guardarrama, Caunao, Cuba una iniciativa sociocultural que rescata las tradiciones orales y culturales de la comunidad, incluyendo leyendas, refranes, música campesina y juegos tradicionales.
Por último en ܳó roja se revisaron las prácticas de “Pensamiento Crítico y Justicia Social” de la Escuela Primaria Carlos Manuel de Céspedes, Cienfuegos, proyecto orientado a combatir el discurso de odio en la educación, promoviendo el pensamiento crítico en estudiantes mediante estrategias didácticas, también de “Derechos de la Infancia y Ciudadanía” de la Escuela Josué País García, Camagüey, Cuba que concientiza a los estudiantes sobre sus derechos como niños y niñas, fortaleciendo su formación ciudadana a través de actividades que fomentan valores, conocimientos y habilidades esenciales para la vida o “Guajirito Soy” de la Escuela Raúl Gómez García, Santiago de Cuba que promueve hábitos de alimentación saludable y estilos de vida sostenibles, integrando conocimientos sobre nutrición y bienestar en la formación escolar.
Todas estas experiencias y muchas otras en curso inspiran un cambio educativo en el siglo XXI para la redPEA y todas las escuelas de la región.
Próximos pasos
Dentro de los compromisos de la Oficina de La Habana y las acciones de seguimiento está la elaboración de un curso MOOC que permita expandir y profundizar el conocimiento del estudio, así como una herramienta que facilite su integración en las acciones de escuelas a nivel nacional. Durante el segundo semestre del 2025 se pretende publicar el reporte.