Noticia
Más de 80.000 “escuelas verdes” de todo el mundo siguen las recomendaciones de la UNESCO

Las escuelas se encuentran en primera línea a la hora de proporcionar a alumnos y a comunidades las claves para poder hacer frente a los desafíos climáticos. En este Día Mundial del Medio Ambiente, quiero felicitar a aquellas escuelas que ya han aplicado las recomendaciones medioambientales de la UNESCO y aliento a los responsables políticos, docentes y alumnos a incorporarse al movimiento de las escuelas verdes.
La UNESCO, bajo el impulso de su Directora General, ha hecho de la educación medioambiental una prioridad, tanto en lo relativo a su incorporación en los planes educativos como en la vida cotidiana de los centros de estudios.
En 2024, la Organización publicó las normas de calidad para escuelas verdes, un marco en el que se definen por primera vez los requisitos mínimos para crear “entornos verdes de aprendizaje” en torno a cuatro ámbitos: gobernanza escolar, infraestructura y operaciones, enseñanza y participación comunitaria.
La guía se centra en acciones concretas e incluye la creación de un comité de “gobernanza verde” en cada escuela, integrado por alumnos, docentes y padres, con el cometido de supervisar la gestión sostenible de la escuela. También pide que se forme a los docentes en estas cuestiones, que se lleven a cabo auditorías energéticas, hídricas, alimentarias y relativas a los desechos, y que se establezcan vínculos con los agentes locales para alentar a los alumnos a que pongan su granito de arena en favor del medio ambiente.
Un año después de la publicación de esta guía, disponible en español, francés, inglés y portugués, 27.450 jardines de infancia, 39 587 escuelas primarias, 13.329 escuelas secundarias y 507 centros de enseñanza superior han adoptado las recomendaciones de la UNESCO. La mayoría de estos establecimientos se encuentran en Europa, América del Norte, Asia y el Pacífico.
Las escuelas verdes están acreditadas por los gobiernos y las organizaciones autorizadas, como la Fundación para la ܳó Ambiental y la Red de Escuelas Asociadas de la UNESCO. El objetivo es que de aquí a 2030 existan al menos un 50% de escuelas verdes en todos los países.
El llamado de la UNESCO a la educación ambiental cobra impulso
Además de la norma de calidad para las escuelas ecológicas, la UNESCO publicó en 2024 las orientaciones para currículos verdes, que proporcionan consejos concretos a los diferentes gobiernos acerca de la manera de incorporar los temas medioambientales a todas las asignaturas escolares en todos los niveles de enseñanza. El objetivo es que el 90% de los países integren el cambio climático en sus planes de estudio de aquí a 2030.
Mediante la Iniciativa de Sistemas Educativos Inteligentes con el Clima, la UNESCO ayuda a los ministerios de educación de 35 de los países más vulnerables al cambio climático para que refuercen sus capacidades en este ámbito.
Estos programas forman parte de la Alianza para una ܳó Verde. Liderada por la UNESCO, esta iniciativa congrega actualmente a 97 Estados Miembros y a más de 1.700 organizaciones, entre las que figuran organismos de las Naciones Unidas y organizaciones de la sociedad civil, la juventud y el sector privado, en torno a cuatro pilares de acción: desarrollar las escuelas verdes, incorporar los temas relativos al medio ambiente a todos los programas escolares, adaptar la formación del cuerpo docente al cambio climático y promover comunidades verdes.
Datos recientes muestran el firme compromiso de los países que se han incorporado a la alianza: el 85% tiene previsto integrar los temas relativos al cambio climático y la sostenibilidad en la enseñanza, el 66% se ha comprometido a desarrollar sistemas nacionales de acreditación de escuelas verdes que se ajusten a las normas de la UNESCO, y el 69% creará redes de escuelas verdes a escala nacional.
A pocos días de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los éԴs (UNOC), la UNESCO trabaja también en fomentar la educación oceánica, en particular mediante su programa , cuyo objetivo es integrar las ciencias oceánicas en los currículos escolares, la red Escuelas Azules, que reúne a más de 2.400 escuelas, y el programa de educación oceánica , en colaboración con Prada, que ha sensibilizado a más de 35.000 escolares de 56 países sobre las cuestiones relativas a la conservación de los océanos.
